El pasado fin de semana varios activistas de la organización AnimaNaturalis fueron agredidos mientras se manifestaban en las inmediaciones del Circo Kroner, llegando a producir una fractura en el tabique nasal de un activista. En esta página web se puede encontrar más información.

Envío todo mi apoyo a los activistas agredidos. Desgraciadamente no es de extrañar ese comportamiento en el caso de los trabajadores de circos donde son usados animales, si tenemos en cuenta la manera en que se obliga a dichos animales a formar parte del espectáculo: descargas eléctricas, golpes, privaciones de comida y agua, latigazos... No obstante, no podemos pasar por alto que si actualmente hay circos con animales es porque asiste público a los mismos. Conforme los ciudadanos dejen de asistir a dichos espectáculos y dediquen su tiempo a espectáculos que no provocan sufrimiento animal, los circos con animales dejarán de existir.

Leo la noticia de que un perro fue retenido en la aduana del Aeropuerto Internacional de Guadalajara (México) durante cuatro días:

http://www.oem.com.mx/eloccidental/notas/n1489274.htm

La responsable del perro, Sally Wilson, llevó a cabo junto a otros veinte manifestantes una protesta por la actitud de los trabajadores de la aduana, quienes retuvieron al animal pese a que la señora Wilson tenía documentos acreditando que el animal no tenía enfermedades contagiosas.

Me opongo al sufrimiento de los animales y al especismo (la discriminación de los individuos por no ser de determinada especie). Por ese motivo no llevo casos que contribuyan a que los animales sigan siendo sufriendo y sigan siendo discriminados.

Varias personas que contribuyen con su negocio o con sus actos a la explotación animal se han puesto en contacto conmigo con la intención de contratar mis servicios. Por supuesto, he declinado todas esas ofertas y he explicado el motivo.

El pasado 10 de diciembre se celebró en varios países el Día de los Derechos Animales. Una fecha en la que diversas organizaciones realizan actividades buscando concienciar a la sociedad sobre el hecho de que la manera en que nos relacionamos con los animales es profundamente injusta.

Millones de animales son matados cada día en granjas, mataderos, laboratorios... Esta es una injusticia a la que nos podemos oponer día a día, modificando nuestros hábitos de consumo y adoptando un estilo de vida vegano, es decir, rechazando consumir productos de origen animal. El veganismo contribuye a poner las bases para dar pasos hacia una sociedad con menos especismo (discriminación de los animales por el hecho de no ser de determinada especie).